Los políticos polacos abordaron este martes su difícil lengua oficial con el objetivo de obtener el galardón de 'Grupo Parlamentario Cero Faltas' en una prueba de dictado organizada en el Senado del país y emitida por televisión para dar entrada al 'Año del idioma polaco'.
Grupos de diputados y senadores ayudaban y asesoraban a los redactores propuestos para escribir un texto dictado por uno de los más conocidos lingüistas polacos y que estaba basado en el tema: 'La nueva, e incluso súper-nueva, historia del parlamentarismo polaco'.
El texto, de 150 palabras de extensión, estaba plagado de trampas lingüísticas del lenguaje polaco, que, con sus siete casos de nombres y declinaciones de adjetivos, más conjugaciones verbales que pueden variar para hombres y mujeres, se considera, no obstante, uno de los idiomas más fáciles dentro de las lenguas eslavas.
Según las reglas del consurso, no se permitía ni copiar de un compañero ni abandonar la sala del Senado donde estaba teniendo lugar la competición.
Al igual que ocurrió en las últimas elecciones parlamentarias del pasado septiembre, el partido conservador Ley y Justicia (PiS) fue el mejor, aunque todos aquellos que participaron fueron premiados por su esfuerzo con un diploma y un diccionario.
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