Los bomberos asturianos se niegan a participar en desahucios
«Rescatamos personas no bancos», aseguran y confían en que el Gobierno
no «pretenda utilizar este servicio en ejecuciones hipotecarias»
La imagen que acompaña a estas líneas es del verano pasado, pero la
comunicación oficial de su postura frente a los desahucios llegó ayer a
las redacciones en forma de comunicado. Quizás el cariz que han tomado
con los meses las noticias relacionadas con los desalojos de las
personas que ya no pueden hacer frente a sus créditos hipotecarios les
haya motivado para salir a dar la cara. «Bomberos de los ayuntamientos
de Oviedo, Gijón y el Principado de Asturias manifestamos nuestra
adhesión a la postura del resto de los bomberos de España en el tema de
desahucios». Es decir no participarán en ninguna acción que tenga que
ver con el desalojo a la fuerza de una familia «inmersa en situaciones
dramáticas». «Nuestra función -añaden- es la de socorrer y prestar
auxilio al ciudadano en prácticamente todo tipo de situaciones de
emergencia según la normativa de Protección Civil, nunca la de forzar
una vivienda para facilitar la expulsión de familias inmersas en
situaciones dramáticas».
Así reza el comunicado en el que, además, los bomberos de toda Asturias
consideran «inadmisible que se nos pretenda involucrar en situaciones de
orden público, acentuado con un trasfondo tan dramático e injusto». Es
más, para evitar confusiones enviarán una copia de su escrito al
Gobierno regional con el fin de solicitar «su compromiso para que no se
pretenda utilizar el servicio de bomberos en ejecuciones hipotecarias».
El gesto más visible realizado hasta el momento por los bomberos tuvo
lugar recientemente en La Coruña, donde efectivos que habían sido
llamados para colaborar en el desalojo de una anciana se negaron a
colaborar con el resto de las fuerzas de seguridad que formaban parte
del operativo. El importante despliegue policial puesto en marcha para
ejecutar este desahucio judicial no pudo con los miembros de la
plataforma Stop Desahucios a los que sorpresivamente se sumaron los
bomberos coruñeses.
A partir de ese momento, aunque algunos parques de otras ciudades ya
habían manifestado su rechazo a participar en estas acciones, fue
corriéndose entre los bomberos la idea de unirse en un movimiento
contrario a las ejecuciones bancarias. Así las cosas, los bombero se
niegan a tirar puertas si no es para protagonizar un rescate.
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