Un ex militar de 45 años, autor de todo tipo de invenciones para satisfacer su pasión por el juego, pidió, en su última aventura en un casino de Cannes (Francia), ser detenido por la policía para poner fin a una mala jornada, informaron fuentes policiales el sábado.
El ex sargento-jefe del ejército, originario de toulouse, se presentó el jueves en el restaurante de un casino de la Croisette diciendo que no podía pagar la cuenta y pidiendo que llamaran a la policía.
El arma y el cargador que puso sobre la mesa terminaron de convencer a los empleados del restaurante para que intervinieran las fuerzas del orden.
El hombre dijo espontáneamente que había atracado tres estancos en la región de Toulouse en las últimas semanas para financiar su pasión por los juegos de azar.
En su último asalto hubo disparos y el militar, arruinado y abandonado por su mujer, decidió, explicó a los policías, romper el círculo vicioso entregándose.
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