Los arrestados son miembros de la banda latina de los trinitarios. Asaltaban a mujeres de avanzada edad en mercadillos ambulantes y a las puertas de los supermercados
La comisaría de Villa de Vallecas ha detenido a tres jóvenes, entre ellos un miembro de los trinitarios al que amputaron un brazo en 2011 durante una reyerta (y que pudo serle reimplantado), acusados de atracar al menos a cuatro ancianas en Madrid.
Los arrestados, con edades comprendidas entre los 18 y los 21 años, seleccionaban a sus víctimas en mercadillos ambulantes o en supermercados, siempre fijándose previamente en que portasen objetos de oro o plata. Una vez elegida la víctima la seguían, incluso en transporte público, hasta que llegaban a su domicilio, donde los tres arrestados las abordaban en el portal de sus viviendas o en el ascensor.
La investigación se inició cuando los agentes comprobaron la existencia de varias denuncias en donde las víctimas, todas mujeres mayores, aportaban una serie de datos coincidentes. En todos los casos los autores eran dos o tres varones jóvenes, de origen latinoamericano, que empleaban cualquier excusa para acceder con ellas al portal de sus domicilios y, una vez dentro las obligaban a entregar todas sus pertenencias de valor, especialmente joyas, para después huir a la carrera.
Tras varias pesquisas los agentes lograron finalmente identificar y detener a los tres responsables de al menos cuatro robos con violencia. Uno de los arrestados fue identificado por las víctimas gracias a un llamativo tatuaje que llevaba en un brazo. La investigación ha permitido además imputar a otros dos jóvenes, también pertenecientes a la banda de los «trinitarios», el asalto a un hombre de avanzada edad cuando se encontraba acompañado de su nieto.
A uno de los detenidos, en 2011, en el transcurso de una reyerta en el distrito de Puente de Vallecas le fue seccionado el brazo izquierdo con un arma blanca de grandes dimensiones. Entonces, gracias a la actuación de los agentes de la Policía Nacional que le practicaron un torniquete e introdujeron el miembro en hielo para su conservación, la extremidad pudo serle reimplantada.
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